El partido antieuropeo Alternativa para Alemania (AfD) ha formado un nuevo grupo político en el Parlamento Europeo, el tercero de la derecha radical, junto con diputados de otros siete países. Esta medida permitirá al grupo acceder a beneficios administrativos y económicos en la nueva legislatura. La AfD fue expulsada anteriormente del grupo Identidad y Democracia debido a declaraciones en su periódico en defensa de las SS nazis, y tampoco fue aceptada en el nuevo grupo liderado por Marine Le Pen.
Los fundadores anunciaron en un comunicado que “después de una intensa consulta, hemos creado el Grupo ENS”. Declararon que se habían unido con el objetivo común de influir significativamente en la futura política europea a través de acciones decisivas y planificación estratégica. Este enfoque, dicen, es necesario para hacer realidad su visión de una “Europa de patrias fuertes, unidas y con visión de futuro”.
La ENS está formada oficialmente por 25 eurodiputados de nueve países diferentes, cumpliendo así los requisitos mínimos para formar un grupo parlamentario. Se especuló sobre la posible participación de la organización española Se Acabó La Fiesta (SALF) de Luis ‘Alvise’ Pérez, pero finalmente no se incluyó ningún representante español en la lista de miembros.
Composición del Grupo ENS
Además del AfD, que aporta la mayoría de sus miembros, el grupo ENS incluye a tres eurodiputados de la Confederación Polaca, tres del Renacimiento Búlgaro, uno de Nuestra Patria Hungría, un lituano de la Unión del Pueblo y la Justicia, un eslovaco de la República, un francés de Reconquista y un checo del GSDP.
La ENS será el octavo grupo parlamentario más grande del semicírculo y está considerada la más extremista y antieuropea. Se formó en el último minuto antes del inicio de la legislatura esta semana y, aunque cumple con el número mínimo de parlamentarios y estados, no está claro si podrá permanecer activo durante toda la legislatura.
Actualmente hay otros dos grupos de extrema derecha en el Parlamento Europeo: Patriotas por Europa, fundado por el húngaro Viktor Orbán y al que se unió Marine Le Pen, y el más moderado ECR, liderado por la primera ministra italiana Giorgia Meloni.