Vestida con un traje pantalón blanco confeccionado por el sastre de su padre, la princesa Leonor ha afrontado su día grande con sobriedad y templanza, Leonor ha proclamado su compromiso de servicio a los españoles y, al mismo tiempo, ha pedido confianza.
Ha sido la protagonista, pero, en realidad, el protagonismo ha sido de la Constitución y de la Corona, unidas en una ceremonia, celebrada en el Congreso, ante las Cortes Generales, prácticamente calcada a la que protagonizó Felipe de Borbón hace casi 38 años.
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Un día en el que Leonor, en el acto que ha tenido lugar en el Palacio Real, ha hecho una declaración de principios, “me debo a los españoles y les pido que confíen en mí”; una celebración en la que el Rey ha recordado, ante su hija y los poderes del Estado: “El deber de Leonor, como también es el mio, es cumplir y respetar la Constitución”, y una cita histórica en la que la heredera ha estado flanqueada en la comida oficial por Miquel Roca Junyent y Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, los únicos padres vivos de entre los redactores de la Constitución hace 45 años.
“Me debo desde hoy a todos los españoles”, ha dicho Leonor, un compromiso al que ha seguido un ruego “les pido que confíen en mí, como yo tengo puesta toda mi confianza en nuestro futuro, en el futuro de España”. De pie, en el Salón Carlos III del palacio real, la Princesa de Asturias y de Girona ha hecho su primer discurso con todas las atribuciones para llegar a ser la futura reina de España, y lo ha hecho después de que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, le ofreciera el “la lealtad, el respeto y el afecto del Gobierno”, el mismo día en el que los ministros de Igualdad, Irene Montero, de Derechos Sociales y Agenda Digital, Ione Belarra y el de Consumo, Baltasar Garzón se han ausentado de los actos del Palacio Real y del Congreso.
La jornada de la Princesa comenzaba con una primera felicitación de la Casa Real que, de buena mañana, publicaba un tuit en X en el que resumía lo que iba a ser el día: “Hoy la Princesa de Asturias cumple 18 años y jurará la Constitución ante las Cortes Generales como símbolo de su compromiso y entrega a los españoles”, ha escrito junto a cuatro fotos de la heredera.
Poco antes de las 10.45 de la mañana, la comitiva real, que incluía los dos Rolls Royce históricos en los que viajaban los Reyes, por un lado, y la princesa Leonor con la infanta Sofía, por otro,a han salido de la Zarzuela camino del Congreso, a donde han llegado, en un último tramo escoltados por la Guardia Real. Tras ser recibidos, a pie de calle, por el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y en la escalera de la Puerta de los Leones, por la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y el del Senado, Pedro Rollán, Reyes, Princesa e infanta se han dirigido a la tarima que cubría la habitual presidencia del Congreso.
Armengol ha recordado a los poetas, en catalán, euskera y gallego, después de celebrar lo que ha denominado “compromiso con nuestro sistema político”, y reconocer que la princesa Leonor es “una digna representante de este país, un país moderno y abierto al mundo. Una joven cercana al sentir mayoritario de su generación”. La actual presidenta del Congreso ha hecho un elogio de su predecesor, Gregorio Peces- Barba, que fue quien tomó el juramento del príncipe Felipe, en 1986, pero sus vivas a la Constitución, a España y al Rey han sonado menos rotundas que las que gritó el que fue presidente del Congreso entre 1982 y 1986.
Aunque la fórmula que ha utilizado la Princesa en su juramento ha sido la misma que usó su padre:“Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y de las comunidades autónomas y fidelidad al Rey”, el diseño del acto ha tenido un aire de austeridad y modernidad que se ha reflejado en la indumentaria femenina: en la jura del anterior Príncipe de Asturias, tanto su madre, la reina Sofía, como sus hermanas, Elena y Cristina, lucieron trajes largos de ceremonia. No ha sido el caso, Leonor ha llevado un traje pantalón, indumentaria inédita en un acto institucional de la Corona, mientras la reina Letizia ha repetido un vestido azul corto de Carolina Herrera y la infanta Sofía, un vestido blanco y negro de Erdem.
El acto de entrega de las medallas del Congreso y del Senado a la Princesa ha cerrado la primera parte de los actos institucionales que han seguido en el Palacio Real después de que la comitiva recorriera las calles que separan ambos edificios. En el Salón Carlos III de la que fue residencia real hasta Alfonso XIII, Leonor ha recibido una nueva condecoración: el collar de la Orden de Carlos III, la más alta distinción del Estado que ha lucido durante toda la comida encima de su pecho y también encima de la insignia del Toisón de Oro que llevaba en la solapa.
La comida en el Palacio Real a la que han asistido Gobierno, representantes de las altas instituciones del Estado, ha estado precedida de las palabras de Felipe VI que han comenzado con un mensaje del Rey a su heredera y han finalizado con las de un padre a su hija. Sí, Leonor alcanzaba su mayoría de edad y juraba la Constitución, pero también era una jovencita celebrando su 18º cumpleaños.