El Inter de Milán recibía a la Juventus en un duelo directo por el liderato de la Serie A. Pese a que el cuadro ‘interista’ dispone de un partido más a su favor, no podía permitir doblegarse ante una Juventus que ha demostrado recuperar la competitividad que le caracteriza como club en la presente temporada.
El encuentro arrancó igualado con un ‘toma y daca’ constante e internadas de ambos equipos. La ‘Vecchia Signora’ intentaba deshacerse del Inter saliendo rápido al contragolpe, pero sin aprovechar las pocas ocasiones de las que dispondrían. De hecho, sería el flamante Vlahovic, con doce goles y dos asistencias en liga, quien perdería una oportunidad única para adelantar a su equipo.
Dusan Vlahovic en una disputa con Henrih Mkhitaryan / EFE
Una contra comandada por McKennie dejaba en clara ventaja al delantero serbio, pero el control no fue bueno y dio tiempo a los ‘Nerazzurri’ para reponerse. Para muestra la jugada del único gol del encuentro. Darmian oteó desde el flanco derecho la incorporación de Pavard al área, pero no conectó con el remate. Sin embargo, Thuram estuvo al acecho y al intentar rematar provocó que Gatti se introdujera el balón en propia puerta.
Una Juventus impotente y un Inter desatado
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La segunda parte agravó el guion de la primera. Con un Inter mucho más incisivo y una Juventus más sometida. El partido era un correcalles y el conjunto visitante estaba roto. Las contras locales eran una constante y solo Szczesny fue capaz de evitar el desaguisado propinado por sus compañeros.
Los de Inzaghi recuperaban con una facilidad pasmosa, mientras que los de Allegri dejaban patente la frustración para culminar las contras. Calhanoglu estrelló una volea en el poste derecho de la portería rival e hizo uso de su magia proveyendo balones a sus compañeros. Una ‘folha seca’ de Gatti, héroe y villano con el gol de la ventaja, fue de las pocas ocasiones que dispondría el cuadro ‘Bianconeri’ en los últimos 45 minutos.
