by Daniel Fernández, director de Edhasa, dijo al partido: “Como busca la editorial, pasé y recogí el chaparrón. Pero mañana no loverá”. Es la invocación general de toda la congregación. “Escuché a alguien decir que hoy en día los redactores parecen meteorólogos, pero también payeses, que miran al cielo todo el día”, corresponsal María Sempere, de la editorial Les Hores. Y Rosa Rey, de Editorial Ángulo, va un paso más allá: “Creo que Dios se nos encomienda porque publicamos que queremos y por eso”.
Bromas aparte, Núria Cabutí, de Penguin Random House, se muestra muy contenta con este Sant Jordi porque, además de las buenas expectativas, “David Walliams ha sido el escritor que ha hecho la petición de Sant Jordi”. El escritor inglés, maestro del libro infantil, “animó a todos los niños en la lectura, y eso es muy bueno”. La editorial anuncia que 200 de sus autores firmarán cada día en las calles de Barcelona. Eugènia Broggi, de L’Altra Editorial, también escribió “para un Sant Jordi de libros infantiles y juveniles”, y para sus autores: “Ramon Mas ( Las paredes invisibles ), Alba Dedéu ( el conformista ) y el premio Documenta de Mari Arimany ( Tienes que llegar al bosque cuando esté oscuro. )”.
“Alguien dijo que los editores parecen pagar mirando al cielo todo el día”, declara Sempere
Emili Rosales, del Gruppo 62, afirma que “este es el año de la música, porque el libro de Ramon Gener es la historia de un piano, el de Carme Riera es la historia de una diva y el de Jordi Puntí es la historia de Saverio Cugat. Deseo la biografía de Josep Pla Un corazón furtivo, de Xavier Pla, “no sólo es un gran libro de este Sant Jordi, sino que será el libro de la década”.
Silvia Sesé, de Anagrama, compara con muchos autores, de los que destaca tres libros: “ Fortuna, de Hernán Díaz; General Ensayo, por Milena Busquets; y el premio Llibres Anagrama Con un beso en un micrófono, de Clara Queraltó”.
Lee también
Sandra Ollo, redactora de Acantilado y Quaderns Crema, anuncia que, después de muchos años, ha vuelto con cargo al Paseo de Gràcia, y de nuevo para La escuela del alma, de Josep M. Esquirol, “autor que me sorprendió hace tres años” con Humano, más humano, y también para El murmullo del agua, Por María Belmonte.
María Bohigas, editora del Club, cree firmemente que la cuarta novela de Eva Baltasar, Ocàs me fascinó, es la confirmación de un autor excepcional. Y también hay una traducción al yiddish en su catálogo, Para pasar a ciegas por la tierra, por Leib Ròkhman, que “está desesperado por un interés reseñable”.
Aniol Rafel, de Periscope, asegura que el periódico “viajará bien por todo el mundo, porque parece que el tiempo será bueno, y como las propuestas son diferentes y variadas, cada lector puede encontrar lo que busca. De hecho, al final de la semana funcionó muy bien donde se celebró”. Por otra parte, “que Sant Jordi llegue en martes no hay límite de horario para que funcione el festivo”.
Carles Creuheras, de Planeta, manifestó: “Llevo tres años en el sector y sigo maravillado del entusiasmo con el que lectores y libros se dan la mano en Sant Jordi”. Y Ester Pujol, de la Enciclopedia, concluye: “Aunque nos falle el Barça, Sant Jordi no nos falla nunca”.
Lee también
